Libertad para ser libre

"Somos libres y tenemos libertad para serlo, porque nos protege una ciudadanía y nos rige una Constitución con una Carta de Derechos como el derecho de expresión, derecho de asociación, de religión, de viajar y de votar.La Estadidad es lo que más conviene a Puerto Rico.

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Libertad para ser libre

Ismael Fernandez

17 de octubre de 2005

La frase que sirve de título a este espacio es una traducción libre de un discurso de bienvenida del juez federal Jaime Pieras a un nutrido grupo de inmigrantes extranjeros en la ceremonia de juramentación como nuevos ciudadanos de Estados Unidos. Estas ceremonias se celebran dos o tres veces al año en toda la nación, incluyendo a Puerto Rico.

Siempre hay un orador especial, no para decir un discurso, sino para destacar lo significativo del momento y la culminación del esfuerzo y esperanza de estos viajeros en busca de la libertad y la felicidad, buscando el llamado “sueño americano” de libertad y progreso sin miedo a ser perseguido y confiados en la protección de las leyes por igual, y de las oportunidades de una vida mejor para el resto de su existencia. A eso se refirió básicamente el mensaje del juez Pieras como es norma y costumbre siempre en ese tipo de ceremonia aquí y en todos los Estados Unidos.

Somos libres y tenemos libertad para serlo, porque nos protege una ciudadanía y nos rige una Constitución con una Carta de Derechos como el derecho de expresión, derecho de asociación, de religión, de viajar y de votar. Eso es lo que el juez Pieras llama libertad para ser libre, eso es tener y poder ejercitar esos derechos. Porque hay millones y millones de personas que nacieron y viven en países que se gobiernan por una constitución de sueños y derechos en el papel, pero que en la práctica son inexistentes.

Y son países libres e independientes, pero sus hijos no tienen libertad. Libertad para ser libres no es un juego de palabras en el vacío, ni un concepto sin contenido real si no existe una constitución y una ciudadanía como la que tenemos en Estados Unidos. Ningún país del mundo tiene dentro de sus fronteras más inmigrantes del extranjero, de cercanas y lejanas distancias, que Estados Unidos. Por cierto, hay millones haciendo turno para entrar a cualquier precio, aún a costa de jugarse la vida contra el hambre, contra las fieras marinas y a costa de su liberad si son sorprendidos en la empresa.Lo vemos todos los días en nuestra Isla. A diario se publican informes de personas interceptadas a mitad de ruta y mar afuera, o ya después de llegar a tierra, que son buscados y apresados por violar las leyes de inmigración. Con nosotros conviven miles de llamados “indocumentados”, cuya procedencia no hay que explicar. Todos llegaron en busca de libertad para llegar a ser libres y alcanzar los derechos que les asegura la Constitución federal.

Derechos que como cita el juez Pieras, no son teoría, sino que forman el carácter básico de la sociedad y del gobierno. La idea de la libertad y la igualdad como base del gobierno “es una invención de la revolución americana”, hecha por hombres que dejaron atrás una Europa que era gobernada por las clases privilegiadas.

Y crearon una América (Estados Unidos) donde la libertad de ser libre es natural, que viene de la cuna donde se nace. Una América, de la cual Puerto Rico forma parte hace 107 años, hecha con el sacrificio de todos, en sangre, en sudor y en lágrimas. Nosotros hemos dado nuestra aportación en las trincheras y los montes de Corea, las junglas de Vietnam y los llanos y desiertos de Kuwait e Irak, dijo el orador. Esos inmigrantes, los nuevos ciudadanos, y los que están haciendo turno para alcanzar la meta de sus sueños, ya no tienen que temer a las dictaduras ni a ser “desaparecidos”. Que como nosotros los puertorriqueños puedan disfrutar la experiencia de un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.

El juez Pieras señaló que la Corte Federal sigue a la bandera y a las instituciones que garantizan a los ciudadanos de Estados Unidos el disfrute de un gobierno de leyes y no de hombres, y señaló a aquellos propagandistas en la Isla que quieren ver desaparecer la Corte Federal como separatistas e independentistas que quieren separar la Isla de Estados Unidos.

En un llamado directo a los nuevos ciudadanos, el juez Pieras les dijo que sean conscientes y sepan apreciar nuestra cultura política y la cultura política que prevalece en países menos afortunados. “Sus deseos de libertad les han traído a estas tierras lejanas. Mantengan en alto sus deseos y podrán ver el lugar donde están sus sueños”, declaró el Juez federal. Son sueños realizables. En el grupo de nuevos ciudadanos americanos habían personas procedentes de más de veinte países extranjeros, la mayoría de República Dominicana, Cuba, Centroamérica, Sudamérica, China y de otros países de Europa y Asia.

Las palabras del juez Pieras son oportunas en momentos en que se esperan acontecimientos trascendentales sobre el futuro status político de la Isla. La situación colonial nos niega oportunidades y ofende nuestra dignidad de pueblo, y se habla de determinaciones unilaterales por parte del gobierno y el Congreso de Estados Unidos para orientar o imponer a la Isla una solución aconsejada por los estudios que se están haciendo en Washington y cuya culminación se espera en los próximos meses.

Si la ruta a seguir es en consulta de referéndum, los nuevos ciudadanos tienen derecho a participar. Habrá quienes les salgan al paso a esa participación pretendiendo negarles su derecho, pero la ciudadanía adquirida y la Constitución, que ahora les protege, les garantiza su voto. Para ustedes estos son nuevos tiempos. ¡Bienvenidos a esta nación de leyes y derechos!